Sí, habéis leído bien el título, existe un animal capaz de llorar sangre, sangre a presión, y lo mejor de todo, como método de defensa. La naturaleza, en su lado más exótico y gore. A continuación os exponemos una breve explicación del lagarto, pero si queréis ir a la acción y verle lanzar su chorro de sangre a presión, id al primer vídeo de esta entrada.
El lagarto cornudo es una especie diurna. terrícola y solitaria. Es increíblemente especial, por haber desarrolló una gran variedad de tácticas para evadir a sus depredadores. La primera línea de defensa es quedarse completamente inmóvil y fuera de la vista, lo que consigue asemejando el color de su cuerpo al color del sustrato (mimetismo, como los lagartos).
Las mencionadas protuberancias también juegan un papel importante en varios aspectos: disminuyen la sombra proyectada por el animal, de tal manera que hacen el color mimético aún más efectivo, y en caso de que el animal quede descubierto, esta armadura formidable llena de cuernos y espinas, representa una amenaza significativa para muchos depredadores, en especial cuando el llorasangre (otra manera de llamar al Lagarto Cornudo), en su propia defensa, hincha todo el cuerpo convirtiéndolo en una bola espinosa. En último extremo puede arrojar chorros de sangre por las comisuras de los ojos hasta un metro de distancia.
¿Chorros de sangre? Suena espectacular, ¿verdad? Os dejamos con un pequeño e impactante vídeo de 30 segundos, dónde podéis su defensa final:
Como podéis ver, el comportamiento de estas lagartijas es extremadamente particular, pero no es el fin de los fenómenos especiales. Poseen un comportamiento defensivo, rara vez vista en el mundo animal. Como habéis podido ver en el vídeo anterior, el animal al sentirse atacado, expulsa un chorro de sangre, por medio de unas glándulas ubicadas en el ángulo interior de los ojos. De allí su antiguo nombre llorasangre. Cuando son atacados por especies caninas (coyotes, perros y zorros), el depredador abandona a su presa inmediatamente después de que ésta emplea este tipo de defensa, e intenta sacudir el fluido de su boca, lo que sugiere que tiene un mal sabor.
Para finalizar, os dejamos un pequeño vídeo, dónde se ve al enigmático lagarto, utilizando una gran variedad de sus armas defensivas, culminando como no, con su defensa final contra un feroz coyote.
Ya había visto antes este vídeo, pero por más que lo veo una y otra vez nunca deja de sorprenderme y de parecerme fascinante... el mundo animal tiene muchísimas sorpresas para nosotros y habrá muchísimas aun que no conocemos. Saludos!
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